Empujada a ser mejor por el audaz Tigre, la Liebrecita emprende un año de exigencias y retos que pueden ser muy bien recompensados; sin embargo, tendrá que ser paciente y demostrar que se merece el lugar que tiene. Si trata de huir o no defiende su posición con convicción y entereza, entonces el Tigre podría demostrarle que no es tan hábil como creía. La Liebre tendrá que afrontar responsabilidades y compromisos para obtener recompensas y no terminar tambaleante el año lo cual no es recomendable pues el año que viene es el suyo.
Liebre de Madera: 1975
Liebre de Fuego: 1987
Liebre de Tierra: 1999
Liebre de Metal: 1951 / 2011
Liebre de Agua: 1963
¿Qué depara el destino para tu signo? No dejes de ver el siguiente vídeo: